Los seres humanos pasamos por acontecimientos vitales importantes. ¿Te ha pasado que en una situación conflictiva sobre piensas mucho las cosas al grado de provocarte cierto malestar?. Esta acción no sólo es ante acontecimientos negativos, sino también positivos, de acuerdo con su relevancia emocional en nuestra vida, produciendo estados emocionales tanto de bienestar como de malestar.
Alguna vez te has preguntado, ¿qué emociones son las que sobre piensas con más frecuencia?.
Algunos estudios mencionan que la tristeza es la que tiene más incidencia, y si bien el impacto de los acontecimientos negativos es más duradero que en un suceso positivo, genera un mayor impacto siendo más persistente en nuestro pensamiento y la memoria, afectando de forma más intensa y prolongada.
¿Qué pasa cuando compartes tus emociones?
Dentro de este proceso, el interés es una condición indispensable, ya que a través de este se manifestará la empatía. Esto ayudará a que el exponente sienta que el receptor lo escucha y es capaz de entenderlo, dando apertura a compartir sus sentimientos, generando un soporte y haciéndolo sentir acompañado y comprendido.
Todo este proceso produce un efecto provechoso bastante simple: al momento de hablar con alguien que es importante para ti y le comentas una situación emocional, produce alivio, y da una sensación de bienestar. Esta sensación se experimenta incluso de manera física, ya que nuestro cuerpo se ha desactivado, reduciendo la actividad fisiológica y malestar asociado a este estado.
Existen lugares seguros donde puedes hablar acerca de lo que te pasa, sin sentirte juzgada/o, un espacio lleno de acompañamiento y comprensión a tus procesos. En Neandi tenemos un espacio para ti.
Elaborado por: Amanda Yañez

Photo by Matthias Cooper
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